Hektor sigue siendo un conejo muy reservado. Las situaciones nuevas le inquietan mucho, pero con mucho tiempo y cariño seguro que aprende a confiar rápidamente. Hektor llegó al refugio procedente de un mal hogar. Sería muy feliz con un congénere o con un grupo de conejos ya existente. Para mantenerlo en un entorno adecuado a su especie, debe haber espacio suficiente para que juegue con ganchos, un segundo nivel para una visión óptima y la oportunidad de cavar. También hay que tener en cuenta que los conejos no son animales mimosos. Sin embargo, son muy interesantes de observar.